Verdaderas gigantografías al óleo “hechas para galerías como estas” -según palabras del propio pintor, han sido expuestas en el mes de mayo en el Centro Cultural Padre Félix Varela. Se trata de piezas abstractas que llevan al espectador a sumergirse en el misterio de la Creación, a la vida primigenia en el momento en que Dios la moldeaba con sus manos. O tal vez nos transporta a los vericuetos del espíritu humano, lleno de claroscuros y de formas inasibles que sólo Dios conoce, y que acaricia con sus manos llenas de ternura, sin quitarnos la libertad.
Dayron Gallardo es un joven pintor que ha venido a esta casa a hablarnos de la presencia misteriosa y a la vez grandilocuente de Dios en medio de todo lo que nos rodea, incluso, dentro de nosotros mismos.